El St Regis Rome es un hotel bellísimo con una atmosfera excepcional. El servicio al cliente en la recepción fue muy atento a nuestras necesidades y nos hicieron sentir bienvenidos desde el momento en que llegamos. La arquitectura y el diseño del hotel son impresionantes, creando un ambiente elegante y lujoso. Además, disfrutamos de la música en vivo y de la deliciosa comida preparada al momento durante nuestro desayuno. También apreciamos el gesto de compensación por el problema con las limpiezas, recibiendo chocolates y una nota de agradecimiento.

El personal del hotel se esforzó por hacer que nuestra estancia fuera especial, especialmente para nuestros hijos. Desde el agente de recepción que nos acompañó personalmente a nuestra habitación, hasta el portero que realizaba trucos de magia para entretener a los niños, nos sentimos cuidados y atendidos en todo momento. El personal de la sala de desayuno también fue muy atento, llevando globos de colores a las mesas de los niños todas las mañanas.

En resumen, tuvimos una experiencia de 5 estrellas en el St Regis Rome y definitivamente volveremos en el futuro. Recomendaríamos este hotel a cualquiera que busque una estancia lujosa y memorable en Roma.